¿PARA QUE SIRVE UN MINUTO?

Un minuto sirve para sonreír.
Sonreír para  otro, para tí.....
Un minuto sirve para ver el camino, sentir el olor de la salitre del mar, sentir el césped mojado......
Se requiere apenas de un minuto para evaluar la inmensidad del infinito, aunque sin poder entenderlo.
Un minuto sirve para oír el silencio, o comenzar una canción.
Es en un minuto en que uno dice el "sí" o el "no" que cambiará toda su vida.
Un minuto para un abrazo y conquistar un nuevo amigo.
Un minuto para sentir la responsabilidad pesar sobre los hombros, la tristeza de la derrota, la amargura de la incertidumbre, el hielo de la soledad, la ansiedad de la espera, la marca de la decepción, la alegría de la victoria.
En un minuto se puede amar, buscar, compartir, perdonar, esperar, crer, vencer y ser.
Tan sólo un minuto para incentivar a alguien o desanimarlo.
Basta un minuto de atención para hacer feliz a un hijo, un padre, un amigo, .......
Solo un minuto para entender que la eternidad está hecha de minutos.
De todos los minutos bien vividos.
Un minuto... Cuántas veces los dejamos pasar sin darnos cuenta... pero también cuántas veces traemos a nuestras vidas los recuerdos de los minutos vividos llenos de felicidad, de alegría y también de tristezas.
Decimos "un minuto" y nos parece nada.
Pero cómo se valora ese minuto cuando hace que lleguemos tarde a trabajar, cómo se espera ese minuto en el que volveremos a ver a quien queremos...
Un minuto... parece increíble... parece tan poquito y sin embargo puede dejar una huella tan profunda en nuestra vida.
Lo importante es no vivir la vida porque sí, dejando pasar el tiempo.
Alguien alguna vez dijo: "Vive cada minuto como si fuera el último".
Si recordaramos esta frase, aprenderiamos a no posponer las emociones pensando que "si no es hoy será mañana".
Es el  ahora... el futuro es incierto...
Tenemos que vivir cada minuto intensamente.