lunes, 14 de marzo de 2011

Huellas


Anoche tuve un sueño.
Soñé que caminaba por la playa
en compañía tuya.
En la pantalla de la noche
se proyectaban los días de mi vida.
Miré hacia atrás y vi huellas sobre la arena:
una huella mía y otra tuya.
Cuando se acabaron mis días
me paré y miré hacia atrás.
Vi que en algunos sitios había sólo una huella.
Esos sitios coincidían
con los días de mayor angustia, de mayor miedo,
de mayor dolor de mi vida.
Entonces te pregunté:
“Tú dijiste que ibas a estar conmigo
todos los días de mi vida?
¿Por qué me dejaste sola,
justo en los peores momentos?
Tu me respondiste:
“Los días que has visto una sola huella sobre la arena,
han sido los días
en los que te he llevado en mis brazos.



1 comentario:

Ezequiel Zelin dijo...

Una preciosa fábula cielo... llevame tu también en brazos cuando no tengas las fuerzas de seguir yo solo... te amo